La madre de un joven, que ha sufrido acoso sexual, denunció a un pederasta a la unidad de servicios especiales. Para poder condenar al pederasta, deciden que el joven colabore con el servicio en una acción especial, sin embargo, en el último momento la operación se frustra. Según el psicólogo que trató al pederasta tiempo atrás, cuando fue acusado por sodomia, es un hombre impenitente e imparable, y no le funcionó ninguna terapia.