Transilvania
Un film de vampiros que se vampiriza a sí mismo. Un viaje de la luz a la oscuridad, de la figuración a la abstracción.
Un film de vampiros que se vampiriza a sí mismo. Un viaje de la luz a la oscuridad, de la figuración a la abstracción. Un proceso violento y absorbente en el que la imagen y el sonido se desintegran píxel a píxel, nota a nota, permitiendo al espectador construir una nueva película en su mente. La localización –un pueblo de Transilvania- y los personajes –unos vampiros al acecho- son solo un pretexto.