Kelly McIntire, una atractiva joven, sufre un colapso en una discoteca envenenada con estricnina. Todo forma parte de un plan asesino, pero un médico y el novio de la chica, pensando que se trata de un intento de suicidio, la envían a la quinta planta de un hospital psiquiátrico. Una vez allí, Kelly es violada por un empleado y es testigo de numerosas muertes y suicidios. Escapar del horror de la quinta planta se convierte en su principal objetivo.