Jean Carter, la hija de 11 años de una familia que recién se ha mudado a un pequeño pueblo de Canadá, dice haber sido corrompida por un hombre que le ofreció caramelos. El viejo del que hablaba la niña resulta ser el Sr. Olderberry, abuelo de la familia más antigua, arraigada y poderosa de la ciudad. Aunque los padres están convencidos en denunciar el caso a la policía, el proceso judicial no será tan sencillo como esperaban.