Viaje por una larga noche
Joaquín Orduña es un terrateniente que desea la gubernatura de su Estado y para lograrlo ha recurrido incluso al crimen, al hacer pasar como accidente un incendio que cobró la vida de 500 campesinos en una Iglesia. Joaquín tiene además conflictos con su hermano Fernando, quien acaba rompiendo con él. A través de sus recuerdos de infancia se da a conocer la historia de su familia, muy ligada a la Iglesia y a otros círculos del poder, y se devela cómo, tras la muerte del padre, quien fue colgado por órdenes del capataz Enrique García durante una revuelta campesina, e influido por un cura que se convirtió en su tutor, Joaquín creció obsesionado por el poder.