El personaje principal de esta película es René Rupnik, un ex profesor de matemáticas. Tiene cuarenta años y vive con su madre en un bloque de pisos desolado. Desde su juventud le fascinan las mujeres con pechos grandes, porque para él simbolizan una especie de madre tierra. Nunca ha tenido una relación especialmente estrecha con su propia madre; ella era demasiado "huesuda" para él. El objeto de la fantasía de René es la actriz Senta Berger, para él todo lo que debería ser una mujer. De pie junto a la pizarra y explicando las leyes matemáticas del seno y el coseno ('seno' es seno en latín), René canta alabanzas a las curvas femeninas y a las de Santa Berger en particular. El cineasta Ulrich Seidl dejó que el ex profesor hablara libremente sobre sus obsesiones y deseos, intercalando sus monólogos con escenas de la vida cotidiana del protagonista.
