Mike, hijo de un comerciante inglés de Londres, es enviado por su padre a pasar unas vacaciones a Japón a cargo de la familia Saito en Tokio. El cambio accidental de la cámara fotográfica de Mike por otra idéntica perteneciente a una joven, provocará un lío tremendo, puesto que tras el carrete de fotos que él posee ahora va una banda de traficantes de droga.