Una joven hereda un castillo, situado en una isla, que según la leyenda está habitado por fantasmas cuyos gritos se oyen todas las noches. Pese a todo, la joven decide visitar la propiedad en compañía de un cantante y un conductor de autobús, pero éstos quedan atrapados en el interior del castillo y tendrán que vérselas con unos muertos vivientes.