Una indagación lúcida y pasional en la intimidad de una familia extraña, enigmática y corrupta. "Muros Ardientes" es el reflejo inmediato de lo que comenzaba a suceder en Italia en 1936. La corrupción del fascismo se canaliza en esta familia por el sexo, y no siempre un sexo plausible, sino aquel que encierra la palpitación de lo perverso y aberrante.