Febrer
De repente, un día, la vida se para
29 de febrero: ¿un día inventado?, ¿un día regalado? Lars Belden, vendedor de casas para gente adinerada, casado y con un hijo, ve cómo su vida se detiene ese día. Por casualidad lee en un periódico la noticia del suicidio de Sela Huber, su antigua novia. La curiosidad y el amor que todavía siente por ella le arrastran a visitar el piso de Sela, del que aún conserva unas llaves. Allí descubrirá que el estudio, donde nunca dejaba entrar a nadie, está lleno de cintas. Lars se da cuenta de que ella grababa compulsivamente toda su vida. De una manera desordenada irá dando forma a todo el pasado de ella, de otras personas que se cruzaron en su vida y de él mismo. Todo esto, durante tres noches, le ayudará a entenderla a ella y a sí mismo y, lo más importante, por qué acabó su relación y por qué él dejó de escribir, su gran pasión.