Paladium es un misterio. En algún momento fue uno de los templos nocturnos más vivaces y vanguardistas de Buenos Aires, donde performers y pioneros del movimiento queer, viejos tangueros y la nueva ola del rock argentino convivían virtuosa y desprejuiciadamente. Hoy, como el resto del centro porteño, es apenas un fantasma: demolido, abandonado, sin archivos ni homenajes. Francisco Novick es hijo de uno de sus creadores, pero su padre se niega a hablarle del tema. Con la carga de ese pasado ausente, cultural y familiar, se lanza a reconstruir la experiencia de ir al lugar junto a la comunidad que lo volvió emblemático. Aunque sea por una última noche.