Caperucita y Pulgarcito contra los monstruos
La bruja malvada organiza un juicio contra el lobo feroz y contra el ogro por hacerse colegas de Caperucita y Pulgarcito respectivamente. En el juicio los monstruos de otros cuentos los declaran culpables y los condenan a morir previa dosis de ridículas torturas. La bruja de marras como no tiene bastante invoca los poderes del mismísimo Satán para convertir el agua de los ríos en Sangre. Los aldeanos del pueblo donde viven los dos protagonistas no se huelen nada raro al ver el agua convertida en sangre y se la beben como si tal cosa, quedando todos ellos maldecidos. Continuación de "Caperucita y sus tres amigos"